Arctic Tales

El primero, Skrei - Il Viaggio, toma su nombre de una antigua expresión vikinga å skrida, que significa viajar, emigrar, avanzar, pero sobre todo es un viaje fotográfico para resaltar el vínculo entre Italia y Noruega. De hecho, el viaje de Valentina Tamborra comienza en la Biblioteca Apostólica Vaticana de Roma y luego en la Biblioteca Nacional Marciana de Venecia, donde se conservan los registros del aventurero viaje de Pietro Querini en 1432, cuando sobrevivió al naufragio de su barco, a las islas Lofoten y fue rescatado por los pescadores locales, de quienes aprendió los métodos de conservación del bacalao, que exportó a Venecia a su regreso.

Con Mi Tular - Io sono il confine Valentina Tamborra viaja a las islas Svalbard, una franja de tierra helada situada en el océano Ártico, donde osos polares y personas se disputan una frontera invisible. La palabra Tular, que en etrusco antiguo significa yo soy la frontera, recuerda el mito de Ultima Thule, la última isla más allá del mundo conocido.